Afortunadamente el skate solidario ha dejado de ser algo inusual y proyectos como Skateistan son conocidos por la mayoría de los patinadores. Ahora vamos a fijarnos en Etiopía para hablarte de Megabi Skate, un proyecto de recogida de material que ha llegado a nuestro país a través de Bibiana Rosales de la mano de la Asociación IZEL United Skateboarding de un pequeño pueblo de Galicia llamado Marín y la colaboración de la skater Silvia Serret y algunos skaters más. La catalana estuvo de gira por España con la intención de recopilar todo el material posible y hacérselo llegar a los de Megabi, así que nos pareció buena idea ponernos en contacto con el responsable de la asociación, Israel Dejene, y tomarnos un café virtual con él para que nos explicase de primera mano su bonita iniciativa. Esto fue lo que nos contó:
¿Con quién tenemos el gusto de hablar?
Me llamo Israel Dejene, pero todo el mundo me llama Izzy. Nací y crecí en en el barrio Shiromedade Addis Ababa, Etiopía y soy el fundador de Megabi Skate, que anteriormente se llamaba Ethio Skate y es la primera organización dedicada al skateboarding del país. Soy skater y músico.
Creo que la música te llevó al skate…
Sí. Fue hace doce años durante un viaje a Suecia para actuar. Ahí vi a alguien patinado por primera vez en mi vida y quedé prendido para siempre. Me puse a aprender del tirón y, cuando volví a África, vi a los chicos de mi barrio tirándose por las cuestas con plásticos. Relacioné ambas cosas y surgió la idea de introducir el patín en mi comunidad. Lo más loco es que lo hice sólo con el monopatín que me traje de Suecia.
¿Cómo llegó la primera rampa al país?
En 2012 colaboramos con Christian Skaters para traer al primer team americano. Vinieron con gente que sabía de construcción e hicimos dos rampas de salto, un half portatil y dos quarters. Esos fueron los primeros módulos del país, pero más tarde vino la peña de California Skateparks e hizo el primer parque en condiciones. Además, ya que estaban por aquí, le metieron mano a un dique para hacerlo patinable.
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¿Qué ha cambiado desde que empezaste con Megabi hasta hoy?
Desde que todo esto comenzó en 2012 han venido un montón de skaters de todo el mundo y hemos ganado popularidad y, por lo tanto, apoyo, así que nos hemos podido expandir a nuestra iniciativa a otras ciudades etíopes. Ahora estamos también en Bahirdar, Hawassa y Arbaminch.
Creo que la mujer tiene un papel muy importante en vuestro proyecto ¿No?
Claro. Ellas son parte del movimiento desde el principio. De hecho mis dos hermanas patinan. La más pequeña fue una de las primeras chicas en iniciarse con el patín y de ella salió la rama Megabi Skate Girls. Para ellas no son fáciles este tipo de cosas, ya que en nuestra cultura suelen asumir el rol de cuidadoras de la familia. Vamos, que se las cría para quedarse en casa mientras los chicos son los que disfrutan de los deportes al aire libre. Ahora son muchas las que han seguido sus pasos y podéis echar un ojo a sus progresos a través de la cuenta de Instagram @Megabiskategirls.
Creo que nos va a costar explicar todo lo que hay tras Megabi Skate en una conversación tan breve. ¿Hay alguna forma de acceder fácilmente a más información?
Creo que lo mejor es que le echéis un vistazo al documental. En 2015 vino gente de XGames, ESPN y National Geographic a documentar el paso de unos pros por aquí. Quedó muy bien y lo echaron varias veces en la BBC. Meteros en Google y escribid “Dream Big. Skateboarders in Ethiopia”. Ahí queda todo bastante claro.
Bueno, pues ahora sólo falta que nos digas cómo puede ayudar la gente desde Europa si no se encuentra con Silvia.
Buah, ahora tenemos en mente construir un edificio dedicado a los más jóvenes y seguir creciendo, así que todo el que quiera apoyar se puede poner en contacto con nosotros a través de megabiskate@gmail.com.
Creo que eso es todo de momento. Muchas gracias por todo y mucha suerte con tus proyectos. Tú y los tuyos sois puro skateboarding.
Texto: Javier Saavedra
Fotos: Megabi